domingo, 30 de septiembre de 2007

Argentina, país generoso


Y entonces caen los créditos, nombres yanquis y algún que otro latinoamericano que se habrá escapado de Cuba para vivir en Miami parte de la fantasía del consumo y demás. Lo cierto es que cuando termina Sicko, la última película del crítico y ácido director de cine Michael Moore, Argentina parece un lugar mejor, más lindo, e incluso, más solidario.

El documental nos hace ver la importancia de las instituciones públicas, de tener hospitales donde no se hace distinción entre pobres, ricos, extranjeros y otras clasificaciones de entes que para las autoridades estadounidenses parece no clasificar como personas. Incluso también se destaca el valor de la Educación "gratuita", y hasta se refleja la fobia que nuestros vecinos del Norte le tienen a la palabra "socialismo". Película más que muy recomendable: para ver y reflexionar sobre aquella tierra prometida de la que tanto hablan algunos empresarios.

sábado, 29 de septiembre de 2007

harto de...



Harto de elegir por mensaje de texto quién es más gracioso: si Olmedo o Fontanarrosa,
harto de la violencia pasiva-televisiva,
de jugarse la sangre en un terreno virtual y poco definido;
harto del plástico sobre hielo,
conjunto de formas inflamables
entre lágrimas de cocodrilo y caballo.
Harto del morbo, del paco, de lo peor de lo peor
que significa esa mínima porción del mundo
que vemos por un rectángulo que enajena,
que victimiza de forma casi dictatioral.
Harto del chisme fácil,
de los hamsters,
del aparente reflejo de la sociedad,
del sexo encubierto,
de la insinuación que provoca pero no libera,
de la paráfrasis, del géminis, de la osmosis,
del divertimento cuasi onanista,
de la inflación, de Arjona,
de la puma-manía,
de la adicción a correr maratones,
de lo cool, de lo techno, de lo PRO.-

jueves, 27 de septiembre de 2007

¿No es sospechoso?

Desde lejos no se ve...pero desde el aire sí.



Crease o no, es una parte del complejo de la Armada en Coronado, Estados Unidos. Incluso desde el Google Earth se ve muy claro el edificio-esvástica. La construcción es de fines de la década del '60, y ahora el gobierno planea gastar unos 600 mil dólares en remodelar la infraestructura, luego de haber recibido numerosas quejas.



Si querés saber más, acá está la nota que salió en Clarín: lo bueno, si breve, dos veces bueno.-

Accidente

18.38, Avenida Juan B. Alberdi al 1000, Caballito, Capital Federal.

Camino al accidente...


El momento en el que llega la ambulancia...


La pseudo-noticia


Esta bonita noticia salió hoy en Clarín

es como una noticia de verdad, porque está bien arriba de la página, pero no se dejen llevar por las apariencias.


Economía 4 - Indec 2: la tensión política llegó a la cancha y el equipo del Gobierno volvió a ganar
Anoche, Clarín.com asistió en exclusiva al partido de fútbol 5 que jugaron "Los Cabrones", un equipo de trabajadores del INDEC, frente a un grupo de empleados del INPI, otro organismo dependiente del Ministerio de Economía. La intimidad del partido y todo el análisis de una batalla que se juega, también, a nivel nacional

miércoles, 26 de septiembre de 2007

Fiesta-Karaoke en el Festival de Teatro


Fiesta, festival, teatro, Karaoke, pantalla, intelectuales, figurar, pseudo, psico, pisco, basta, cuasi, predio, cerveza, choripanes, anteojos, concepto, arte, nuevo, gente, gente, más gente, estudiantes, cine, rusa, grito, escenario, canción, idioma, extranjero, actores, entonar, ¿actores?, computadora, sueño, cigarrillo, chaleco, esnob, punch, crac, groove, flash, ouch, yes, rock, naif.-

martes, 25 de septiembre de 2007

TEAdmiro - columna escéptica I


(En simultáneo con NO PUBLICABLE)


Sorpresa en el zapping nuestro de cada día: cara conocida en la casa más –tristemente- famosa del país, o al menos así la denominan opinólogos y panelistas a la prisión de Gran Hermano V. Se llama Florencia Tesouro, cursa el segundo año de Periodismo en TEA, va al turno tarde, y no es un dato anecdótico que haya ganado el último Miss Reef Bikini Open, competencia de la mejor cola del verano.
En su página -http://www.florenciatesouro.com/- abundan fotos y videos, y en caso de que el usuario quiera saber más a cerca de su vida personal –solo eso, vida personal y datos-, no es recomendable googlearla: su nombre lleva a más fotos y más videos, y hasta a links con páginas para mayores.
Así que ahora GH carga con una abanderada de TEA: tiembla la institución en caso de que aparezcan posibles “videos locos”, como estilan incluir en su currículum oculto los simpáticos jóvenes reflejo-de-la-sociedad que protagonizan el reality.

lunes, 24 de septiembre de 2007

veintitrés cosas en las que no creo (parte II)


No creo en los panales de abejas,
ni en la linterna a dinamo-recargable-con luz alógena,
ni en los señaladores,
ni en el viagra,
ni en que tengamos un brazo más largo que otro,
ni en que los padres no mienten,
ni en las fundas para celulares,
ni en la comodidad de trabajar desde tu casa,
ni en el día de la raza,
ni en el alimento balanceado,
ni en los antivirus,
ni en el hombrecito que titila en el semáforo,
ni en las pulgas,
ni en los lugares típicos,
ni en los relojes de arena,
ni en los dibujos animados,
ni en la mantequilla de maní,
ni en que nunca haya un solo culpable,
ni en el mágico golpe de gracia,
ni en el pete de Wanda Nara,
ni en Wanda Nara,
ni en Wanda,
ni en Nara.

sábado, 22 de septiembre de 2007

La (fukin) Prima Vera...


Ma' qué día de la primavera ni que ocho cuartos, ¡¿día de qué?! ¡¿primavera?! ¿Por qué también no festejan el día del otoño, del invierno, del verano? Todo verso, pibe, to-do ver-so; a mí no me vengan con cuentos chinos, todo muy lindo los colorcitos, el amor, las florcitas, pero este día lo inventaron los puesteros, porque en mis tiempos, te explico, pibe, en mis tiempos el día de la primavera servía para ir de levante, salías con amigos, le zumbabas una milonga en el oído a una nami, tocabas un poco la guitarrita, le cabeceabas y ella ya entendía el gesto, y directo a los bifes, nada de darle la manito, por ahí un café, un carrito en la Costanera, pero de ahí no pasaba, no como ahora que los pibes salen y van a chupar por cualquier plaza y a fumar cosas raras, ¿vos no fumás, no pibe? mejor, hace mal fumar, sino mirá, vas a quedar así, y no te rías, pibe no te rías, respetá a tus mayores que te voy a dar un esquiafo, y a vos, pebeta, no te fíes, que si viene un paparulo con una flor es porque solo te quiere engatusar...

miércoles, 19 de septiembre de 2007

Paga Dios...


Recomiendo leer esta nota. Es sobre un senador estadounidense que "demanda a Dios por la cantidad de catástrofes" que está provocando en el mundo. Y además, al senador le molesta que Dios prometa volver a hacerlo...

Distintas visiones de un mismo tema. Tocá sobre el nombre del medio para leer la nota:








-Notiver(medio mexicano)


-ABC(España)

-El Comercio(Perú)

lunes, 17 de septiembre de 2007

Un goy perdido en Rosh Hashaná (parte III - final)

Segundo tiempo: familia de la madre de mi novia. Más descontracturado, más público joven, más gente -aunque el clásico saludo general es infalible. Como mi novia es "té con leche" (fruto del amor de un padre de orígenes rusos y una madre de orígenes turcos), la comida es turca. De movida, me encajan un kipe en la mano, ovalo de color tostado: el valor energético es proporcional al sabor, y debo confesar que estaba muy, muy, muy bueno. En esos momentos de plena felicidad gastronómica, uno se olvida de las calorías, de las grasas y de todas esas cosas que nos hacen estudiar en sexto grado para que cuidemos nuestra dieta. Pero yo tengo un pasado excedido de peso. Segunda confesión -espontánea- del relato.
¿Qué te sirvo?, alguien me pregunta. Me da un poco de vergüenza pero digo y...un poquito de todo... y la misma persona que hizo el ofrecimiento me sonríe, complacida (alguna vez alguien me explicó que no está bien no comer un poco de todo).
La comida es impecable, como en la primera cena. Solo que en esta última oportunidad, aprovecho la mesa dulce -mi "suegra" habla de mí, por primera vez en la vida, como su "yerno", y eso me genera mucha simpatía- y me sirvo algo que le dicen suspiro. Entonces se produce un momento mágico, casi religioso, en el que descubro a un nuevo amigo, compañero de aventuras: una copita de cristal que en el fondo contiene una crema color amarillo pastel con gusto a chocolate blanco, y sobre esta misma crema -que parece burlar a la llamada crema del cielo porque definitivamente esa es la crema del cielo- asoma una distinguida masa de merengue, exquisita, delicada, prolija y sutil. Entonces, cuando pruebo el postre, cierro los ojos, aferro la mano de mi novia, y digo: bendito Rosh Hashaná.

viernes, 14 de septiembre de 2007

Un goy perdido en Rosh Hashaná (parte II)


El hecho de tener una novia judía, hija de padres divorciados, da como resultado múltiples cenas en conmemoración de un nuevo año que en mi casa no hubiese festejado. Como mínimo, esa noche de miércoles -que no se malinterprete la frase- cenaría dos veces, en dos lugares distintos.

Hace 5768 años, comenzaba a escribirse la historia de nuestro pueblo, explicaría algún amigo de la colectividad, para luego agregar que la fecha es tentativa, y que se rige por el calendario lunar. Al tener dos calendarios distintos, tendríamos una fecha más de cumpleaños. La aclaración me resultó simpática, aunque dudo que eso sirviera para obligar a mis familiares católicos a que me regalaran un obsequio distinto en otra oportunidad.

Primer round: cena en casa de la familia del padre, de orígenes rusos, a diferencia de la madre, que es turca. Hojeaba una revista sobre los premios Konex y alguien me tocó la cabeza: ternura instantánea, hasta que me vi haciendo equilibrio con una kipá. Raro. Al fin y al cabo, Jesús era judío.

Uno de los primos hizo una introducción explicativa y la promesa de volver a hacerlo el año siguiente. Luego leyó algo que no pude entender mientras pasaba en ronda una copa con vino casher: dulce, rico y dulce. Algunos de los invitados dijeron sus deseos para el año que comenzaba, y la abuela -"La Buba"- dio un breve discurso de lo más sentido. A punto de llorar frente a mis -casi- nuevos familiares, me vi bastante estúpido y temí hacer el ridículo ante ellos, que de seguro no sabían de mi faceta metroemocional. Ni siquiera yo sabía eso de mí. No suelo prestarme al show. Perdón.

(continuará...)

domingo, 9 de septiembre de 2007

Un goy perdido en Rosh Hashaná


Vamos a una feria, propuso mi novia. Una feria en Plaza Armenia, agregó, y acepté, sin saber muy bien qué iba a encontrar allí. Es una feria judía que se realiza todos los años, fue la única reseña que dio, y no se me ocurrió relacionar esa misma feria, los carteles de YOK, con el año nuevo judío, Rosh Hashaná. Es más, debo confesar que para mí, antes de haberlo leído, el año nuevo judío era Rogger Yaná, una mezcla entre un gran tenista y algo que ya no es.
Telerman nos regaló una manzana y un sobre de miel a cada uno de los presentes. Mi asesora explicó que la manzana simboliza el año nuevo, y la miel, para tener un dulce año nuevo, suerte de metáfora honey apple en lugar de honey moon. Chiste malo. Igual, el relato me resultó simpático y le creí. No tenía otra alternativa.
Mucha gente: proporcional al calor del sol y al humano, ya que todos se juntaron para ver a una banda de Klezmer. Un hombre mayor invitaba al baile, tomaba de las manos a los reunidos y con amabilidad los obligaba a girar en círculos. Igual, no le importaba mucho bailar solo.
El stand de Frigor desentonaba entre los puestos de yaguarma, libros de temática judía y comidas típicas. Luego, al ver que en la plaza las mesas y las sombrillas eran de Frigor, nos dimos cuenta de lo importante que era que la empresa heladerística estuviera allí. Ni da comerte un kipe de dorapa.
Las remeras que vendían me resultaron muy simpáticas. Una que decía Orgullo goy me hizo sonreír, pero no encontré situación que fuese acorde con aquella vestimenta. Es lo que pasa con algunas cosas. Nací en Eleven tampoco estaba mal. Algunas requerían conocimientos mínimos de judaísmo, acervo del cual aún carezco.
Muchos extranjeros se reunían frente a una pantalla que instaló el gobierno, y en la que se hacía propaganda tanto del evento como de otras actividades relacionadas con la colectividad. Más allá de la cuadra de feria, en el resto del perímetro de la plaza, estaban los puestos habituales de los artesanos. Y más allá de los hippies, se encuentra el acostumbrado esnobismo de Serrano-Armenia, las modelos, y el mundo de los que quizá se sorprendieron con la llegada del año nuevo(?).

martes, 4 de septiembre de 2007

BAFIM u ojos de videotape

Domingo, y contra todo pronóstico, no es una tarde para morirse o sufrir la depresión pre lunes: será por los sorpresivos primeros rayos de sol que trae la primavera, o porque termina otra Feria Internacional de la Música, más conocida como BAFIM. Ya se adelantan los que, con sentida nostalgia, se despidieron de antemano del –posible- último encuentro con este festival, ya que dudan que esta clase de eventos –tanto por la índole como por la magnitud- se encuentre en los planes del nuevo jefe de Gobierno, Maurishio.
La mezcla de géneros trae como resultado una mezcla de caras, vestimentas, palabras locas y anteojos de sol. En la puerta del gran galpón de Dorrego y Zapiola, un viejo hippie persuade a rollingas para que le compren unos sahumerios que él convida mediante un inexplicable hornito. Son poderosos, dice con falso tono misterioso, pero las rollingas mucho no le creen, y siguen camino a la entrada, donde dos promotoras vestidas de rosa y amabilidad, les regalan muestras gratis de píldoras para el dolor menstrual. Los hombres miran: jamás importa qué repartan, la gente quiere, porque es gratis y qué te cuesta darme una cajita. Adentro del galpón, para buscar un programa hay que acercarse a uno de los stands, no sin antes haber agarrado uno que otro volante de publicidad rockera.
Pretensiones forzadas de intelectuales sin nada que decir, se pasean por los escenarios al aire libre, lucen sus pantalones acampanados, sus probables anteojos sin aumento, y esos raros peinados que ya no son nuevos, porque vestirse para la ocasión, ser visiblemente elocuente y a la vez original, de alguna u otra forma es un cliché. No falta el bad-boy-heavy metal que mira con cara de los quiero matar a todos, aunque él haya venido a ver a Lourdes(?), la ex Bandana, reciente dinosaurio revivido al que le hicieron un –comprendido por pocos- lugar en el BAFIM, cosa de que no dijeran que están abiertos a todos los géneros y oídos musicales. Afuera, en el Espacio Patio, toca una banda uruguaya, que no suena del todo bien, pero zafa. Sentada en un rincón, está la chica que toca el sicu en la línea A, mientras una de las bartenders de Ku Pinamar cruza delante de mi vista con el marido, barman del mismo boliche. Jamás pensé que ellas dos se conocerían, y de hecho, no se conocen, ni me reconocen a mí.
Algunos hippies hacen lobby entre los stands, toman mate, y aguardan a que comience en el estadio principal el recital de Mimi Maura. En una ubicación privilegiada, los Villanos firman autógrafos, mientras el grupo de seguridad dice chicos no empujen.
Una pareja punk entra en escena con sus hijitos. Lalo Mir, en la otra punta, baja de su auto con la familia. Semilla termina de tocar, por el altoparlante anuncian algo que nadie escucha, algunos pibes fuman un cigarrillo de dudoso perfume mientras se recuestan en el suelo que más tarde ocuparán los que desean oír una charla sobre Rock Nacional. Una nena dice mamá, estaría bueno…, y lo único que surge en ese momento de colores, de gorros jamaiquinos, de música, de corderoy, de sahumerios, de choripán, de rastas, de sillones, de pin pong, de puff, de papel y hasta de circo, es que lo único que en verdad estaría bueno es que no desaparezcan esta clase de eventos que unen al pibe de Belgrano R que fue a ver a DJ Zuker con el snob que viajó desde Quilmes para ver a Estelares e intentar sacarle el MSN a la piba que fue por Antonio Ríos, invitada por el cuñado de la prima que no le importa ni la música ni el bondi ni el calor ni la novia ni el país y ni fue a votar en las elecciones para jefe de Gobierno.